En las cristalinas aguas de la laguna Sebastopol y la laguna Central, ubicadas en el Archipiélago Los Roques un grupo de investigadores venezolanos conjuntamente con el Centro para la Investigación de Tiburones (Cit) y el Instituto Nacional de Investigaciones Agrícolas (INIA) han desarrollado un proyecto para estudiar estas áreas de criadero de peces cartilaginosos por medio de la técnica de marcaje y recaptura; tras ocho años de observación el investigador Rafael Tavares, reveló que los juveniles de las dos especies analizadas, tiburón Limón (Negaprión brevirostris) y tiburón Macuira
(Carcharhinus limbatus), alcanzan un crecimiento acelerado en estas zonas, propiciando así el aumento de su población en menor tiempo.
Tavares explicó, que el tiburón Macuira en Estados Unidos, Golfo de México y Sudáfrica logra su madurez sexual a los cuatro o cinco años de nacido, mientras que en Los Roques esta misma especie en tan solo dos años ya es capaz de reproducirse, este descubrimiento resulta alentador para la supervivencia de la especie ante la explotación pesquera y además contribuirá con la creación de leyes por parte de Inapesca e Inparques para la protección de estas zonas de criadero.
8 años de marcaje y recaptura
La sensibilidad de este biólogo pesquero por los tiburones nació desde la presentación de su trabajo de grado en el año 1995 y fue este impulso el que lo llevó a trabajar ocho años en el centro de investigación de Los Roques, para luego fundar en el año 2003 el Cit y dedicar su vida al estudio de estos animales.
El marcaje y recaptura de los tiburones en sus áreas de criadero, es una técnica que permite identificar los ejemplares y a través del monitoreo constante registrar información de su crecimiento, el investigador apuntó que las jornadas de trabajo en el caso del tiburón Limón se realizan en horas de la noche utilizando redes, mientras que con el tiburón Macuira se necesitan tres embarcaciones y la captura se ejecuta con “palangres” bajo la luz del sol, agregó que la actividad se ha convertido en un atractivo para el turismo internacional y actualmente el Cit cuenta con un cuerpo de voluntarios provenientes de varias partes del mundo.
Por primera vez en Venezuela
A pesar de que en otros países los estudios sobre tiburones se iniciaron en los años 60 en Venezuela no existía ningún precedente científico acerca del comportamiento de estas especies, gracias a la Locti (Ley Orgánica de Ciencia y Tecnología e Innovación) la empresa privada esta obligada a aportar 5% de sus ganancias al desarrollo de proyectos de investigación científica y es así como el estudio “Áreas de Criadero de Tiburones en Los Roques” hoy cuenta con los recursos necesarios para implementar por primera vez en el país el uso de transmisores en los ejemplares que permitirán conocer a profundidad sus experiencias de vida.
* El futuro de los tiburones en el Oriente del país dependerá de las legislaciones, la educación y la conciencia del pescador y el consumidor. La ausencia de normas de protección frente al incremento de la pesca artesanal disminuye el aprovechamiento del recurso marino e interrumpe el ciclo de vida de los animales en su hábitat natural*
(Carcharhinus limbatus), alcanzan un crecimiento acelerado en estas zonas, propiciando así el aumento de su población en menor tiempo.
Tavares explicó, que el tiburón Macuira en Estados Unidos, Golfo de México y Sudáfrica logra su madurez sexual a los cuatro o cinco años de nacido, mientras que en Los Roques esta misma especie en tan solo dos años ya es capaz de reproducirse, este descubrimiento resulta alentador para la supervivencia de la especie ante la explotación pesquera y además contribuirá con la creación de leyes por parte de Inapesca e Inparques para la protección de estas zonas de criadero.
8 años de marcaje y recaptura
La sensibilidad de este biólogo pesquero por los tiburones nació desde la presentación de su trabajo de grado en el año 1995 y fue este impulso el que lo llevó a trabajar ocho años en el centro de investigación de Los Roques, para luego fundar en el año 2003 el Cit y dedicar su vida al estudio de estos animales.
El marcaje y recaptura de los tiburones en sus áreas de criadero, es una técnica que permite identificar los ejemplares y a través del monitoreo constante registrar información de su crecimiento, el investigador apuntó que las jornadas de trabajo en el caso del tiburón Limón se realizan en horas de la noche utilizando redes, mientras que con el tiburón Macuira se necesitan tres embarcaciones y la captura se ejecuta con “palangres” bajo la luz del sol, agregó que la actividad se ha convertido en un atractivo para el turismo internacional y actualmente el Cit cuenta con un cuerpo de voluntarios provenientes de varias partes del mundo.
Por primera vez en Venezuela
A pesar de que en otros países los estudios sobre tiburones se iniciaron en los años 60 en Venezuela no existía ningún precedente científico acerca del comportamiento de estas especies, gracias a la Locti (Ley Orgánica de Ciencia y Tecnología e Innovación) la empresa privada esta obligada a aportar 5% de sus ganancias al desarrollo de proyectos de investigación científica y es así como el estudio “Áreas de Criadero de Tiburones en Los Roques” hoy cuenta con los recursos necesarios para implementar por primera vez en el país el uso de transmisores en los ejemplares que permitirán conocer a profundidad sus experiencias de vida.
* El futuro de los tiburones en el Oriente del país dependerá de las legislaciones, la educación y la conciencia del pescador y el consumidor. La ausencia de normas de protección frente al incremento de la pesca artesanal disminuye el aprovechamiento del recurso marino e interrumpe el ciclo de vida de los animales en su hábitat natural*
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